La sostenibilidad en arquitectura es más creativa con vigas laminadas
Las cualidades de la madera laminada se multiplican con el marcado CE estructural.
En estos tiempos de revolución mental, de cambios radicales en la forma de ver el mundo, la arquitectura no puede mantenerse al margen. Su papel como detonante de nuevas formas de vivir y de compartir espacios urbanos se ha vuelto aún más importante con la crisis de la covid-19. Es en este extraordinario panorama donde empieza a adquirir importancia un material de construcción innovador, eficaz, sostenible, resistente, bello y versátil en su aplicación: la madera.
Es curioso, y a la vez, lógico, cómo en la recta final del primer cuarto del siglo XXI estamos asistiendo a un redescubrimiento del material de construcción natural que acompaña al ser humano prácticamente desde los albores de la arquitectura. A sus valores renovables (la madera retiene carbono, en lugar de liberarlo a la atmósfera), de calidez y de durabilidad se suman las grandes posibilidades creativas de la madera laminada, beneficios que se logran por medio de la tecnología y los certificados estructurales.
Las grandes ventajas de la madera laminada
La madera laminada es una gran aliada de los arquitectos que no quieren límites para su imaginación. Su versatilidad permite confeccionar piezas grandes y largas, muy anchas o incluso curvas.
Su belleza aporta calidez, ambiente natural y elegancia a todo tipo de edificios, ya sean históricos (rehabilitaciones) o modernos (obra nueva).
La madera laminada es un material de gran resistencia y durabilidad, perfecto para resistir la inclemencia de los ambientes más exigentes, incluida la alta humedad relativa.
A pesar de su resistencia y capacidad, es mucho más estable y ligera que otros materiales estructurales como el hormigón o el acero.
Partiendo de su condición de material combustible, las innovaciones en el diseño y la fabricación de la madera laminada la han convertido en un material de excelente comportamiento ante el fuego.
Utilizar madera laminada ahorra tiempo de construcción, ya que los productos necesarios se pueden conseguir rápidamente bajo catálogo.
Y, por supuesto, una de las mayores ventajas es que se trata de un material de construcción sostenible, que contribuye a proteger el medioambiente y plantar la semilla de un mundo más saludable para las generaciones venideras.
Innovación: muro cortina de madera con vigas laminadas de roble
En GRUPO GÁMIZ fabricamos VIGAM, la única viga laminada del mundo con marcado CE estructural. Nuestras vigas laminadas están siendo utilizadas en proyectos de todo el mundo para dar un nuevo toque a las fachadas ligeras con muros cortina de madera. Un toque que aporta sostenibilidad y belleza en nuestras vidas.
¿El resultado? Interiores de fachadas más cálidos, naturales y ecológicos. Gracias a la madera laminada, en general, y a las vigas laminadas de roble con marcado CE estructural, en particular, un buen número de profesionales que contribuyen a la arquitectura sostenible han ampliado las posibilidades creativas de sus diseños.